El domingo 28 fue un día especial, de eso no hay duda; pero más que nada por el fabuloso ambiente que se crea en estos campeonatos: muchos equipos, cientos de carpas, caras conocidas, reencuentros, nerviosismo y mucha emoción. La verdad que yo llegaba con muchas ganas. No con el estado de forma que debiera, pero sí con muchas ganas de sumar mi granito de arena. Al menos los últimos días veía mejoras en mis tiempos y eso te hace tener un chip más positivo.
Llegamos a La Zarzuela bien pronto. El CD Seoane Pampín compartíamos carpa con el Sporting, ideal porque allí estaba Judith y Toño esperándome con los brazos abiertos. Cerca estaba el Piélagos y Cayon: más besos, reencuentros y abrazos con Raquel, Juanmi, Dolores, Vane y Karina. ¡Venga que esto arranca! Hora de ponerse los dorsales, ir al baño, calentar... Tuve suerte de poder ver a más compañeras antes de competir, a mis chicos del Ríos Running, mi Gemi con Iraia del Santutxu y Raquel y Mamen del Pamplona. Pequeños momentos que guardarás con cariño el resto del año ya que durante la temporada no hay un campeonato como este en que puedas encontrarte con tantos amigos y conocidos.
El momento del calentamiento muy ameno, nunca faltan risas, planes de futuro y ponernos al día del presente, en mi caso muy ajetreado. Llamada a la cámara de llamadas... Esto se va poniendo serio ya. Quitando el vendaval que se formó daba gusto vernos: allí estaban todos nuestros "utilleros", uno para cada una... jajjaja; y nuestro incombustible Fernando que sólo por él merece la pena todo. La pasión que nos infunde a todas, su preocupación diaria por nosotras, su cariño y preocupación en todo momento... No hay manera humana de agradecérselo.
Fue un cross muy duro para mí a pesar de haber mejorado. Me vi muy "fuera de lugar". Los tramos de arena me mataban... ¡Qué leches! En cada uno de ellos me pasaban dos o tres atletas como aviones... jejjeje! Así que, aunque no deje de luchar, no me gustó nada no estar un poco más delante. Sobre todo, por la sensación de que en los cross siempre voy cogiendo gente de menos a más, y esta vez no hubo nada de eso.
Finaliza la carrera. Respiro y lo veo en las pantallas: ¡Aless, Gema, Lucía, Sonia, Rosi y yo éramos Subcampeonas de España de Cross Largo! Y para más alegría del club se completa junto con Ana, Marta, Irene, Mariajo, Mayte y Amaya como... ¡Subcampeonas de Cross Corto! Subir al pódium, ver a los míos, ver por fin a David que venía de la media de La Latina (que siempre me está animando en la distancia)... Observar las caras de felicidad de mis compañeras, de Fernando, Álvaro y Rubén... Son momentazos que me los guardo para que en esos momentos malos me sirvan de "Red Bull mental"... jejjeje!
El chiste del día: me tocó pasar control antidoping. Por primera vez en mi carrera atlética. Fue gracioso porque de los que estábamos allí yo era la que había quedado en una posición cuanto menos "discreta"... ¡jajjaja! La verdad que fue un desbarajuste: tardaron mucho en empezar, íbamos de uno en uno, sólo había un médico... Como no tengo experiencia previa no se valorarlo pero dudo que fuese muy normal. Había oído lo típico de que no "te entran ganas"... Y tuve que esperar... ¡Y vaya que si tuve que esperar! Pasamos un ratito entretenido con Iván, Marta y Aless que fuimos los que más tiempo estuvimos, yo en concreto desde las 14:23 hasta las 16:26. Me perdí la "megacomida" que nos había organizado Fernando a todos, pero llegué a los postres que es lo mejor y a compartir un ratito todos juntos.
Al final del día miraba la medalla y la verdad es que no me sentía merecedora de ella. No estuve a la altura de mis compañeras ni tengo la sensación de haber podido contribuir como a mí me hubiera gustado. Pero espero próximamente poder estar más adelante y poner mi granito de arena en este gran EQUIPO.
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